lunes, 13 de septiembre de 2010

Ilusiones

En una ocasión, un maestro Zen se encontraba llorando desconsoladamente la reciente muerte de su amado hijo. Uno de sus discípulos, aunque conmovido, se le acercó muy intrigado y le preguntó:

- Maestro, ¿por qué lloras la muerte de tu hijo? Como todas las cosas que nos rodean en este mundo, ¿no era él acaso sólo una ilusión?

El maestro, mirando al discípulo con ojos aún tristes, le respondió:

- Sí. Pero era una ilusión muy hermosa.


Parafraseando algo leído hace un tiempo en Twitter; el nombre de Alejandro Jodorowsky viene a mi mente

1 comentario:

Ysi Chas dijo...

Cierto, existen ilusiones hermosas